Unidad Sub-acuática
Si bien el cometido de la Cruz Roja del Mar se limita a salvaguardar la vida de las personas, habitualmente éramos requeridos para otros diversos servicios. La necesidad de auxiliar a embarcaciones inmovilizadas por cabos o redes en la hélice, inspeccionar vías de agua e, incluso, rescatar cadáveres, aconsejó la creación de una escuadra preparada y equipada para las actividades subacuáticas.
El personal que la integraba estaba formado por profesionales voluntarios que acudían a una llamada. Para no depender exclusivamente de las disponibilidades de dichos profesionales, algunos oficiales de nuestra Agrupación obtuvieron el correspondiente título y así quedó definitivamente constituida la Unidad.
Además del rescate de varios cadáveres, en el puerto de Málaga y en las playas, así como otros servicios diversos, realizaban la limpieza de fondos de nuestras embarcaciones, que podían permanecer a flote y evitar su puesta en seco.
Los buceadores siempre actuaban en parejas por razones de seguridad.
El traje es imprescindible para inmersiones prolongadas
La tabla de rastreo (A) permite planear sumergido
por amplias zonas a remolque de una embarcación
El emblema de la CRM no podía faltar aquí también
La señalización de la zona de operaciones es importante
Con los "Hidrolines" se pueden levantar pesos y
reflotar o mantener a flote una embarcación.
Los equipos, a pesar del tiempo transcurrido, no han cambiado demasiado,
pero la cámara usada para hacer fotos bajo el agua está hoy en el museo de
un club de buceo arqueológico.